Salandar en Gredos: Escalada mixta invernal, aperturas por Navamediana



Como ya hemos contado en otras ocasiones, Gredos es uno de nuestros queridos y mimados campos de juego. Y es casi infinito. Te apartas un poco de las rutas típicas del Circo, y es un universo pétreo inmenso por conocer, y por disfrutar. Y en cada época del año se transforma para regalar, aún más si cabe, un plus extra de belleza y plasticidad que nos enamora. Eso sí, no lo regalan; debemos ser cautos, buscarlo y trabajarlo.

Es invierno, y aunque bastante seco, Fernando José Román, Joaquín Gracia y Alberto Sánchez Carmona se han acercado hasta Navamediana para abrir una complicada vía de escalada mixta en una fría pared norte (Musgotracción 200m, WI 2, M6). ¡Son unos máquinas!



Aunque las condiciones de la pared, debido al seco invierno, son un poco precarias, da gusto ver escalar a estos campeones, pertrechados de piolet y crampones, con los arneses rebosantes de cacharros metálicos, conversando sigilosamente con la pared, en comunión con el musgo helado, sintiendo con los pies, con los brazos, con la piel de todo el cuerpo, con la mente y con el corazón. Zonas aéreas, ensambles, chimeneas, bloques empotrados, largos alpinos, desplomes… Este tipo de escalada es una peculiar forma de disfrutar, de expresarse, de dejarse llevar por la roca y el hielo, de comunicarse, de sobre llevar la tensión y de sentir la espiritualidad que te ancla a la roca, al hielo, y a la vida.



Cada aperturista se ha encargado de un largo, abandonando momentáneamente al grupo, poniendo su cuerpo en movimiento y su mente alerta para ser esencia, y parte, de la gélida pared. Cada largo es unitario, diferente, y es la analogía perfecta para confiar en uno mismo y en los compañeros de cordada, rememorando y reflexionando por el progresar en la roca, y en la frágil existencia del ser. Y después se suman todos los largos, formando una vía perfecta para hoy, para disfrutar y comprender, por separado y en conjunto, la tenacidad derrochada, la capacidad humana y la sensible metáfora de la vida.



La vía se encuentra en el corredor lateral de un pequeño y escondido circo al que se accede desde Navamediana. Pero los detalles más técnicos os los cuenta estupendamente Joaquín Gracia en su blog (croquis, más fotos, descripción del acceso, escaladade la vía, etc.)

Comentarios