Europeo de atletismo en Barcelona 2010
Este verano estuvimos disfrutando de/en Barcelona y alrededores y, además, de una parte del Campeonato de Europa de Atletismo, uno de los eventos atléticos más importantes del mundo, que habrá convertido, o no, a Barcelona, en máxima referencia del deporte internacional.
Por lo que cuentan por ahí, era la primera vez que se celebraba el campeonato en nuestra querida España. Y por las calles de la ciudad y del estupendo Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuïc pasaron unos 1.500 atletas, entre ellos varios campeones olímpicos y del mundo, lo que según dicen supone el récord de participación en unos campeonatos de Europa de atletismo. La inauguración (que vimos por televisión) fue muy llamativa pero no me gustó en exceso: mucho ruido y pocas nueces, se dice por mi tierra; para mí los importantes son los atletas y en la inauguración brillaron por su ausencia. Y la clausura, que vivimos en directo, fue paupérrima. Pero bueno, a mí lo que realmente me importa es la competición, con la que disfrutamos con creces.
Los chicos y chicas de la selección de España ha acabado el Europeo de Barcelona en sexta posición con ocho medallas, de las cuales sólo dos han sido oro. La actuación de la selección española no ha sido para tirar cohetes, pero tampoco ha sido mala si tenemos en cuenta los galácticos que viven en otros países (incluidas las dobles nacionalidades de los nacidos en el vecino país africano). Algunos de nuestros nacionales cumplieron, no todos, pero es que en Europa hay grandes dominadores de algunas pruebas, como el británico Mo Farah, que con sendos oros (5.000 y 10.000) dejaba prácticamente inalcanzable el oro para todos sus rivales, que se tenían que conformar con el segundo puesto, como el de nuestro Jesús España en 5.000, una plata que sabe a oro por el calibre del rival. Por eso, y pese a ello, se podría destacar ligeramente la participación española en unos europeos en los que se podían haber conseguido más metales.
Nosotros lo hemos pasado de cine, de cine en HD, aunque es una pena que gran parte de los días el Estadio Olímpico de Montjuïc no haya conseguido grandes afluencias de público, que tiene una capacidad de 32.000 espectadores y parecía que estaba vacío. Supongo que los gallifantes europeos habrán tomado nota de este detalle y luego nos quejaremos de que no tengamos eventos de este estilo, pero claro, yo creo que tiene que haber ciudades en Europa con más afición al atletismo... y si se hace justicia, se lo merecerán más que nosotros...
Y aunque en la página oficial del campeonato aseguran que Barcelona 2010 ha sido un completo éxito y así lo han reconocido todos los observadores y críticos, yo no estoy muy de acuerdo, al menos con este aspecto que he mencionado de la motivación o participación de los asistentes (o no asistentes, míralo como tú quieras). Vamos, que el domingo (día que más afluencia hubo) parecía que estábamos compitiendo en Francia y no en España, ¡vaya paradoja!
En fin.
Necesitaría una tarde entera para describir las sensaciones experimentamos con las pruebas en el estadio, o viendo, ¡viviendo!, la maratón de los superhombres que son los atletas que el domingo, a media mañana y con la que estaba cayendo en Barcelona, se metieron entre pecho y espalda 42 kilómetros y 192 metros... ¡Y a ese ritmo!
¡Vaya ratos! Mix informando desde Alemania con la televisión puesta; el atleta francés que se descuelga; el último kilómetro de Chema, gustándose, saludando al público y disfrutando como un enano; los ánimos al paisano Rafa Iglesias (¡vaya máquina el salmantino!); la progresión de Villalobos... ¡Una mañana digna de repetición!
No entiendo el horario de la prueba, ni por qué privaron a los atletas de la maratón de la llegada en el estadio, ¡con lo emocionante que es eso! Pero así son las cosas...
Después de la resaca maratoniana matutina, sí lo pasamos fenomenal en el estadio en la jornada vespertina, compartiendo buenas pruebas y viviendo los triunfos nacionales, las entregas de medallas...
Y estuvimos con muchos salmantinos que iban a animar a Rafa, o con figuras como Abel Antón, el lanzador Manolo Martínez, el marchador García Bragado, el propio súper Rafa Iglesias... ¡Da gusto poder saludar a los atletas!, menos mal que no son como los del fútbol...
Si queréis las clasificaciones o necesitáis más información podéis visitar la web de la Federación Española de Atletismo, la propia página del Europeo de Atletismo, el artículo del Europeo en la Wikipedia...
Y yo os dejo unas fotos, por si tenéis un hueco y os apetece verlas.
¡Y a esperar otro acontecimiento de atletismo!
Por lo que cuentan por ahí, era la primera vez que se celebraba el campeonato en nuestra querida España. Y por las calles de la ciudad y del estupendo Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuïc pasaron unos 1.500 atletas, entre ellos varios campeones olímpicos y del mundo, lo que según dicen supone el récord de participación en unos campeonatos de Europa de atletismo. La inauguración (que vimos por televisión) fue muy llamativa pero no me gustó en exceso: mucho ruido y pocas nueces, se dice por mi tierra; para mí los importantes son los atletas y en la inauguración brillaron por su ausencia. Y la clausura, que vivimos en directo, fue paupérrima. Pero bueno, a mí lo que realmente me importa es la competición, con la que disfrutamos con creces.
Los chicos y chicas de la selección de España ha acabado el Europeo de Barcelona en sexta posición con ocho medallas, de las cuales sólo dos han sido oro. La actuación de la selección española no ha sido para tirar cohetes, pero tampoco ha sido mala si tenemos en cuenta los galácticos que viven en otros países (incluidas las dobles nacionalidades de los nacidos en el vecino país africano). Algunos de nuestros nacionales cumplieron, no todos, pero es que en Europa hay grandes dominadores de algunas pruebas, como el británico Mo Farah, que con sendos oros (5.000 y 10.000) dejaba prácticamente inalcanzable el oro para todos sus rivales, que se tenían que conformar con el segundo puesto, como el de nuestro Jesús España en 5.000, una plata que sabe a oro por el calibre del rival. Por eso, y pese a ello, se podría destacar ligeramente la participación española en unos europeos en los que se podían haber conseguido más metales.
Nosotros lo hemos pasado de cine, de cine en HD, aunque es una pena que gran parte de los días el Estadio Olímpico de Montjuïc no haya conseguido grandes afluencias de público, que tiene una capacidad de 32.000 espectadores y parecía que estaba vacío. Supongo que los gallifantes europeos habrán tomado nota de este detalle y luego nos quejaremos de que no tengamos eventos de este estilo, pero claro, yo creo que tiene que haber ciudades en Europa con más afición al atletismo... y si se hace justicia, se lo merecerán más que nosotros...
Y aunque en la página oficial del campeonato aseguran que Barcelona 2010 ha sido un completo éxito y así lo han reconocido todos los observadores y críticos, yo no estoy muy de acuerdo, al menos con este aspecto que he mencionado de la motivación o participación de los asistentes (o no asistentes, míralo como tú quieras). Vamos, que el domingo (día que más afluencia hubo) parecía que estábamos compitiendo en Francia y no en España, ¡vaya paradoja!
En fin.
Necesitaría una tarde entera para describir las sensaciones experimentamos con las pruebas en el estadio, o viendo, ¡viviendo!, la maratón de los superhombres que son los atletas que el domingo, a media mañana y con la que estaba cayendo en Barcelona, se metieron entre pecho y espalda 42 kilómetros y 192 metros... ¡Y a ese ritmo!
¡Vaya ratos! Mix informando desde Alemania con la televisión puesta; el atleta francés que se descuelga; el último kilómetro de Chema, gustándose, saludando al público y disfrutando como un enano; los ánimos al paisano Rafa Iglesias (¡vaya máquina el salmantino!); la progresión de Villalobos... ¡Una mañana digna de repetición!
No entiendo el horario de la prueba, ni por qué privaron a los atletas de la maratón de la llegada en el estadio, ¡con lo emocionante que es eso! Pero así son las cosas...
Después de la resaca maratoniana matutina, sí lo pasamos fenomenal en el estadio en la jornada vespertina, compartiendo buenas pruebas y viviendo los triunfos nacionales, las entregas de medallas...
Y estuvimos con muchos salmantinos que iban a animar a Rafa, o con figuras como Abel Antón, el lanzador Manolo Martínez, el marchador García Bragado, el propio súper Rafa Iglesias... ¡Da gusto poder saludar a los atletas!, menos mal que no son como los del fútbol...
Si queréis las clasificaciones o necesitáis más información podéis visitar la web de la Federación Española de Atletismo, la propia página del Europeo de Atletismo, el artículo del Europeo en la Wikipedia...
Y yo os dejo unas fotos, por si tenéis un hueco y os apetece verlas.
f-EuropeoAtletismoBarcelona2010-blog |
¡Y a esperar otro acontecimiento de atletismo!
Sobre el tema "estadio medio lleno, estadio medio vacío" quería yo comentar, sabio Lilloman.
ResponderEliminarEs una pena muy grande ver un estadio con tantos huecos como se veía por la tele. Así lo decían también los comentaristas en la tele. Un europeo de atletismo no es un mundial de júrgol (desgraciadamente, para el europeo de atletismo digo) y llenar un estadio de atletismo es muy difícil. Pero se hace en los mítines europeos, y se hizo en el europeo de 2002 que tuvimos la suerte de vivir juntos, en un estadio olímpico parecido al de bcn. Yo sólo he conocido el de Munich 2002 y viví en directo cómo la ciudad se preparaba y lo disfrutaba aquellos días, sintiéndose el centro del deporte en Europa. No parece que haya sido así en este b2010, por falta de interés de la gente (desde luego no de gente como vosotros que os metéis 800km para verlo) o por falta de habilidad de la organización, que tampoco sé en manos de quién estaba. Una penita que 2 meses antes el estadio de ciudad del cabo estuviera lleno para ver el apasionante Costa de Marfil-Nueva Zelanda de júrgol, y que tan poca gente haya podido ver en directo a Lemaitre romper una barrera histórica, o tan pocos españoles ver a las chicas del 1500. En las calles durante la maratón sí se vió animación, es con lo que me quedo de este europeo. La gente en las calles animando a esos titanes (ahí es un acierto no poner la llegada en el estadio, el maratón es para seguirlo en la calle y verlos pasar unas cuantas veces, ahí estuvieron bien, creo) y sobre todo la respuesta de Chema agradeciendo los ánimos y la respuesta de Rafa apretando los dientes y cruzando zombie la línea de meta después de vaciarse. Grandes personas y grandes campeones que no se pueden ver de cerca todos los días. Qué suerte tuvísteis al verlos!
En fin, menos júrgol y más deporte.
Tú sí que eres un sabio, Mix.
ResponderEliminar¡Lo del Europeo de Munich 2002 sí fue una gozada!, y me refiero al tema de participación de público. Yo, sin vivir allí, sí vi una implicación ciudadana. Daba gusto respirar el ambiente deportivo en la propia ciudad, ver los alrededores del estadio con tanta gente y, por supuesto, el estadio sin una silla vacía.
Lo de Barcelona, y no me refiero a lo deportivo propiamente dicho, me pareció una pena, sencillamente.
Cierto es que en algunas zonas de tan bella ciudad sí había público el día de la maratón, ¡gracias a Dios! Pero lo del estadio era vergonzoso. No sé qué idea se llevarían de esta actitud los entrenadores, atletas, periodistas, visitantes... de otros países. Pero me lo supongo.
En fin.
Seguiremos disfrutando del deporte.
Por cierto, hoy se presenta en Peñaranda un nuevo club de atletismo: club de atletismo Ciudad de Peñaranda . ¡Muchos éxitos os deseamos!, y no me refiero únicamente a los deportivos, sino a los humanos, educativos... ¡Ánimo, compañeros!