San Silvestre Salmantina 2010
Este año volvimos a Salamanca el último domingo del año para participar, como no podía ser de otra manera, en la ya tradicional San Silvestre Salmantina.
Como llevamos un año perreando a consecuencia de las dolencias raras de gemelo, pues la forma física deja mucho que desear. Por lo tanto, este año corrí con Diego en el carrito y fuimos de paseo en compañía de los amigos Angélica y Sánchez, que también iban con su carrito cargando a Luna y Vega. ¡Fue un placer compartir la carrera con ellos!
El domingo fue fresco. Pero fresco, fresco... Salimos de Peñaranda y el coche marcaba cinco bajo cero, que no está nada mal. ¡El invierno charro es lo que tiene!
Ya en Salamanca, en la zona de la salida nos encontramos con amigos, conocidos y desconocidos... ¡Que bonitos son los reencuentros!
Habíamos quedado con los compañeros del Club Atletismo Macotera para la foto de rigor, saludos varios, concertar quedadas, intercambio de camisetas, llaves de coche...
Pero ya antes nosotros estábamos de los nervios, pues Diego tenía que participar en su carrera. ¡Que valiente! Disfrutó como un campeón y llegó sonriente a meta. De hecho, salió en la portada del especial Deportes del Tribuna de Salamanca... ¡Estaba más contento que unas castañuelas...!
Y después, nuestra carrera.
No sé ni quién ganó...
Nosotros nos pusimos atrás del todo, con los disfrazados (¡enhorabuena a todos por la alegría y el color que otorgáis a la prueba!), para no estorbar con el carrito... Salimos por la línea de salida tres minutos después del pistoletazo, ¡y es que hay mucha gente apelotonada! Ya llegando al parque de La Alamedilla pudimos empezar a correr... Al principio estaba preocupado, porque no veía a Sánchez y Angélica, con los que nos encontramos a la mitad de la avenida Mirat. Y desde aquí ¡a disfrutar! En la Plaza Mayor, esa maravilla arquitectónica, nos esperaba Rosa, que nos grabó unos segundos en vídeo...
Realmente ha sido un agradable paseo por una maravillosa zona de esta increíble ciudad que me ha permitido comprobar algo que siempre me comenta el amigo Gabi, y es que atrás también se sufre y si cabe, se sufre más. En la cola del pelotón hay de todo: gente claramente desentrenada (¡hay que cuidarse un poco más), los disfrazados, gente mayor... Pero todos ellos sufren; y disfrutan. Todos intentan dar lo mejor de sí mismo en la carrera. Cuando vas más adelante, con el corazón en un puño y el oxígeno que no te llega a los pies, piensas que los que te siguen van sobradillos, que van más lentos y participan en la carrera para pasar el rato; pero no. Los que vienen detrás también van sufriendo y si me apuras, lo pasan peor... Al fin y al cabo tardan más en terminar la carrera y si el vencedor sufre durante 30 minutos, o lo que sea, los de atrás sufren durante 40, 50, 55...
En fin... Desde aquí mi reconocimiento a todos ellos. A partir de ahora, cuando acabe la carrera y sigan llegando corredores sabré que ellos también lo dan todo y disfrutan como el que más.
Como siempre, enhorabuena a todos los participantes, a la organización (Moli, todavía se pueden mejorar cosillas, como la salida), a los colaboradores, a los que nos acompañan, a los que nos sufren, a los que nos hacen fotos, a los que nos animan y nos aplauden, a los voluntarios...
¡Y a preparar la próxima!
Como lo gozas lillo! Y lo de tu hijo...es la leche, ya le puedes hacer un cuadro con la portada,je,je.
ResponderEliminarY bueno, aunque no nos hemos vistos apenas estos días...Feliz año!
Hola Juan, campeón.
ResponderEliminarLa verdad es que el tío estaba muy contento... ¡Y no es para menos!
A ver si organizamos algo por Malpartida y nos vemos, aunque sea alrededor de la mesa, je, je...
Un abrazo y feliz año.