Integral estival del Circo de Gredos en una jornada rapidita

Tenemos en el Club Salandar algunos compañeros que además de estar como cabras están como toros… Y realizan actividades que no están al alcance de cualquiera de los socios…

Y es el caso de José Antonio ‘Jariego’, que todos los años se mete entre pecho y espalda, en una sola jornada, una ruta circular conocida como Integral del Circo de Gredos, con más de dos docenas de kilómetros de recorrido, un buen puñado de metros de desnivel, y una dificultad bastante alta (en lo físico y en lo técnico, por lo accidentado del terreno y la falta de señalización).

Es una travesía preciosa que transcurre por el perímetro elevado del pétreo corazón del macizo central de nuestra querida sierra de Gredos. Atraviesa las cumbres principales y otras secundarias, sin perder de vista, en el fondo, la famosa Laguna Grande de Gredos.
Los que ya habéis transitado por estos parajes gredenses sabéis que muchas de las zonas de esta ruta son poco frecuentados por personas, y que predominan las zonas rotas con pequeñas rocas o grandes bloques de granito, cortados y precipicios con buen patio, lugares escarpados, aéreos y abruptos para trepar o destrepar y que hasta las cabras hispánicas de estos parajes extreman las precauciones cuando pasean por algunos de estos lugares…

Nos cuenta Jariego que: El 11 de agosto a las 6:00 inicié la segunda edición de mi particular vuelta a Gredos. El año pasado realice la primera edición y disfruté tanto que he decidido convertirlo en una cita obligada cada año.

Después de una buena madrugada, inicio la actividad en la plataforma de Gredos (1.770 metros) para ir hacia Barrerones y la Laguna Grande y justo en su inicio desviarme hasta El Gargantón para iniciar la subida a la Mogota del Cervunal o Cabeza Nevada (2.426) y así coger la cresta. Desde esta cumbre se divisa una perspectiva muy diferente a la habitual del circo de Gredos y ya siguiendo la arista y evitando dejarla llegó cresteando con algo de “ambiente” a la cumbre de la esbelta Galana (2.572) para disfrutar de unas espectaculares vistas. Sigo hasta el techo de Gredos, el Almanzor (2.592), que no por ser el más visitado deja de ser bien bonito. Descenso hasta la portilla Bermeja (2.426) para iniciar la ascensión a la cumbre del Sagrao (2.508), se pasa justo bajo su cumbre por un paso “divertido” en verano pero muy complicado con suelo mojado y prácticamente imposible en invierno (hay que extremar la precaución pues es ésta una zona compleja en la que se han producido numerosos accidentes con desenlace fatal). Continuo cresteando hasta la Portilla de los Machos para iniciar la ascensión al Peñón del Casquerazo (2.436), aquí está, a mi parecer, la vista más bonita de la Laguna Grande. Continuo ahora con un descenso hasta la portilla de Los Hermanitos, pasando por debajo de estos y los riscos de La Campana (2.261) y de La Ventana (2.361), Risco de las Hoyuelas, hasta llegar a la cumbre del Morezón (2.389). Desde aquí, rápido descenso directo hasta el rellano de Prado Pozas y al refugio de los Cazadores donde doy por terminada la vuelta en compañía de José, el guarda.

Un año más, ¡enhorabuena Jariego! Una ruta tremenda por este salandareño de pro, realizando un año más uno de los itinerarios más espectaculares y bonitos del macizo y, además, batiendo tus propias marcas (¡8 horas!), y para la que, no lo olvidemos, se debe de tener muy buena preparación física y conocimiento previo del territorio por el que se transita. Tampoco olvidemos que, como bien ha comentado José Antonio ‘Jariego’ en su descripción, este itinerario en invierno son palabras mayores y en verano también se las trae. Recordad que no suele haber agua en puntos intermedios de la ruta, sí en las fuentes de principio y fin de la ruta, el refugio de los Cazadores o el Elola de La Laguna, o la fuente del refugio del Rey, la de los Barrerones o la de los Cavadores (siempre están los recursos de los regatillos y los neveros, que este año había pero el anterior no).